miércoles, 24 de agosto de 2011

BLACK HAWK DERRIBADO

Resulta curioso comprobar cómo ha ido cambiando el mundo, la sociedad, cómo cosas que antes (no hace tanto), eran contempladas sin que a casi nadie se le ocurriera buscarle segundas, terceras y hasta cuartas lecturas, son ahora diseccionadas hasta hallar en ellas mensajes que, yo estoy convencido, sorprenden incluso al propio autor que, de repente, descubre que ha dicho cosas que ni siquiera se le pasaron por la imaginación.
Estas reflexiones se me vienen a la cabeza, así, a bote pronto, cuando leo algunas de las cosas que se dicen sobre esta película de Ridley Scott. O yo soy muy pardillo (seguramente) y no sé buscarle los tres pies al gato, o es que hay mucho arqueólogo del celuloide, de esos que saben escarbar hasta hallar vestigios de lo que a los simples humanos se nos oculta.

Cada cual puede sacar las consecuencias que quiera de la película, que pueden ser variadas, y yo considero, contra lo que se dice en algunos foros, que esa es (al menos en este caso) una virtud del director que se nos muestra todo un maestro de la ambigüedad, pero es que esa ambigüedad es buscada, no casual.

Pienso (lo pienso yo, sin que nada me avale) que Scott no desea tomar partido y, creo que, en general, en el conjunto de la acción, no lo toma, sencillamente narra. Y la narración es, a tenor de lo que han ido contando quienes allí estuvieron, bastante aproximada a lo que ocurrió.

Otro asunto diferente es la forma en la que envuelve esa narración. Que no tome partido no quiere decir que no tenga su opinión sobre los hechos y, de vez en cuando, como soltándolo con cuentagotas, el realizador nos va dejando detalles de lo que opina a través de cosas puntuales. Me hace gracia oír y leer ciertas críticas que se le han hecho sobre cosas que debería decir y no dice y al revés y, al final, me da la impresión de que yo he visto otra película.

Por ejemplo, se acusa a Scott de desmedido patriotismo, de hacernos ver que los americanos son los buenos y los "flacuchos" (como llaman ellos a los somalíes), los malos. No lo tengo tan claro. Al principio del film, nos presenta a unos Delta Force y a unos Rangers (las tropas que tomaron parte en la misión), bastante prepotentes, chulillos, picados entre sí y que cuando van a partir, alguno de ellos desprecia llevar la cantimplora, el antibalas o las gafas de visión nocturna, porque aquello es como una excursión. Además de dar la imagen de que estos chicos son lo que deben ser en realidad, unos muchachos jóvenes, poco más o menos con un nivel parecidos a los nuestros de la E.S.O., ya sabéis... Otra cosa es que su nivel de adiestramiento para la acción sea elevado, pero el intelectual, no va muy allá que digamos.

Enfrente tenemos a los somalíes, a quienes algunos (muchos) ven representados como gente despiadada, poco menos que asesinos sanguinarios, los malos, vamos.
Tampoco lo acabo de ver tan claro.
En primer lugar, quienes atacan a los yankees son los habitantes de un barrio concreto de Mogadiscio, el mercado de Bakara, donde vive el hombre a por el que van los expedicionarios, un señor de la guerra llamado Aidid. Y esta gente, seguramente era así cuando se las ve con los americanos o con cualquier fuerza extranjera en general, porque sus ánimos han sido exacerbados para que actúen así contra quienes pueden acabar con el estatus que tienen sus jefes.
Scott tiene cuidado de irnos dejando esos detalles a los que hacíamos alusión, por ejemplo, cuando se ve al anciano con el niño muerto en sus brazos que cruza ante la caravana de soldados de la ONU, o cuando se ve a los ciudadanos de otros barrios que aclaman a las tropas extranjeras, al fin y al cabo, gente como Aidid, tampoco les va a sacar de la miseria en que viven.
Además algunos de los diálogos, como el que se produce entre el piloto Michael Durant y uno de sus captores, tratan de poner en su lugar la verdadera dimensión del pensamiento de los nativos (de algunos de ellos, al menos): No desean la injerencia de foráneos, son mal recibidos.

La película, como obra cinematográfica, es una maravilla, para mi gusto, claro. El espectáculo de los black haws sobrevolando Mogadiscio a escasos metros de las azoteas y aterrizando en sus calles; los grandes angulares; los contrapicados; los numerosos efectos especiales; las imágenes en verde recreando la visión nocturna...

La banda sonora, de Hans Zimmer, incluye alguna canción muy conocida de Elvis Presley o Steve Ray Vaughan, así como música árabe. Pero casi forman parte de ella los silencios, las voces, los ruidos de las aspas de los helicópteros, los disparos de la gran variedad de armas que se nos muestras, el tránsito de los humvees, los famosos HMMWV (High Mobility Multipurpose Wheeled Vehicle)...

Es un film, en cierto modo, coral, en lo que a actuaciones se refiere, salvo Josh Hartnett, que tiene más minutos de aparición en pantalla, las actuaciones del resto están concebidas para resaltar la acción colectiva y, como mucho, relatarnos algún hecho puntual, que los hubo y destacables y a pesar de que muchos de ellos son nombre conocidos (Eric Bana, Ewan McGregor, Tom Sizemore, William Fichtner, Sam Shepard...) no se puede decir que cobren especial protagonismo.

Una peli de acción trepidante, bien narrada en el sentido de que a pesar del batiburrilo de acciones paralelas, sabes en cada instante dónde te hallas.
Una de sus facetas más interesantes es que nos hace abandonar el concepto que tenemos del cine bélico típico de la II Guerra Mundial y nos muestra cómo es la guerra moderna, cómo son los conflictos que ahora se viven. Las fuerzas de la ONU, multinacionales por propia definición, y los conflictos que pueden surgir en su seno en cuanto a la ocultación de acciones de unos a otros o a la hora de tomar decisiones (aquí se nos muestra entre los norteamericanos, que ocultan lo que van a hacer a los Pakistaníes, que están allí con ellos). La tecnificación de las actuaciones, con el uso de tecnología punta, lo que tiene sus ventajas, pero el inconveniente de que cuando falla, el soldado anda perdido y los mandos, que siguen las operaciones en directo a través de pantalla, al tiempo están alejados de lo que el soldado siente en sus botas al pisar el terreno.
En ese aspecto, ya digo, me parece de lo más interesante.
En cuanto al mensaje o mensajes que algunos quieren ver, yo creo que Scott deja claro que estas actuaciones son parches que trata de poner occidente, que no valen de mucho, que el soldado norteamericano que está allí, se hace un montón de preguntas, sin acabar de entender el porqué de muchas de ellas y que buena parte se resume en lo que dice uno de los soldados: Al final todo consiste en lo que haces por el hombre de al lado.







16 comentarios:

  1. una peli que me dejo un pòco asi con poco sabor , y no es mala del todo pero no se la tratan desde un punto de vista demasiado yankee para mi gusto
    una que me gusto bastante fue la de lagrimas del sol
    un saludo amigo

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  2. Es que la peli es norteamericana y ellos no tienen los complejos que tenemos aquí, para bien o para mal.

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  3. Mientras te leía he recordado el tema que cantan Denez Prigent y Lisa Gerrard... (Tristes guerras, como lo es esta canción...) Me lo he puesto y una vez situada en la película he continuado la lectura de tu entrada... Me gusta la disección que has hecho, y sería muy largo entrar en debate, pero creo que has acertado en ver la intención del director. (la comparación de los soldados americanos con nuestros chavales de la eso, genial!)
    Me gusta especialmente el párrafo final.
    Sigo diciendo que debe ser un placer ver una película contigo y posteriormente comentarla...
    Un abrazote.

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  4. No creas, Transi, esta es una de esas películas en las que cuando lees cosas que dice la gente y piensas en lo que has visto tú, te da la impresión que cada cual ve una cosa. En este caso, yo creo que es una virtud del director que deja abiertos mil y un caminos a otras tantas interpretaciones, al fin y al cabo las que tienen los conflictos modernos, donde nada es lo que parece.

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  5. La gente se come demasiado el coco con los mensajes de los directores (la mayoría de las veces ellos lo niegan). La peli es mejor conforme pasan los años y es verdad que vale por sí misma, pasando por los actores que intervienen en ella.
    Saludos!

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  6. Hola, no puedo acceder, a tu última entrada.

    Un abrazo.

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  7. A veces me ocurre lo mismo con entradas de otros blogs y no sé muy bien a qué narices serán debidos estos problemas.
    En fin, lo siento de veras.

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  8. Me ha gustado mucho lo que dices sobre los "arqueólogos del celuloide" porque tienes toda la razón, sólo que los hay en la pintura, la literatura ,etc, y en realidad, salvo que en algún caso excepcional pueda ser verdad, lo que son es un puñado de snobs pretenciosos que además desprecian muchas buenas películas para alabar las que son un bodrio.

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  9. A mi me parece una extraordinaria película.
    Un hecho real tratado con crudeza que representa la sinrazón de un pueblo -el somalí -,y de los "señores de la guerra" que son ayudados en la hambruna por fuerzas de la ONU y que responde atacando a las fuerzas norteamericanas.
    Buenos actores,magnífica fotografía, ritmo y un guión trabajado que no da un milímetro a la improvisación.
    Por cierto,la ONU queda retratada una vez más...

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  10. Hay gente que se complica demasiado la vida, Maribel y en lugar de ir a ver una película, parece que van al cine a rebuscar.

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  11. Natalia, todas esas cosas que cuenta la peli (bastante bien a mi modo de ver), dejan al descubierto unas cuantas miserias de nuestro mundo occidental que se dedica a poner parches por ahí en lugar de buscar auténticas soluciones.

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  12. A mi me pareció brillante en realización, aunque un poco truculenta en la operación esa, y una visión de la guerra y de los soldados americanos que nada tiene que ver con la Stone en Platoon, o en La Batalla de Hadizsa, por citar sólo dos. Abre una discusión muy interesante así la película.
    Muy bueno, como es habitual, tu análisis.
    Saludos blogueros

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  13. Gracias, José Antonio, por su sabia aportación.

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  14. Lo que está claro es que sabes un montón de cine y has visto un montón de películas. Yo últimamente estoy viendo bastantes, pero dudo de llegar a tu nivel y sobre todo a tu entendimiento jeje.

    Esta concretamente la vi hace poco. Es un poco larga en mi opinión, y el argumento es únicamente una operación de ataque del ejército y cómo se desarrolla, pero bueno, está basado en hechos reales y sirve para comprender un poco mejor la realidad.

    Desgraciadamente Somalia sigue igual o peor.

    Un saludo.

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  15. Lo de Somalia es una vergüenza para la humanidad, Jesús.
    Gracias por tu comentario.

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