jueves, 12 de abril de 2012

MUERTE ENTRE LAS FLORES

Dos capos mafiosos, uno italiano, Johnny Caspar, (Jon Polito) y otro irlandés, Leo (Albert Finney), se enfrentan abiertamente por culpa de un tipo llamado Bernie Bernbaum (John Turturro), que se dedica a vender información sobre los combates que amaña Caspar, sin permiso de este. Cuando Johnny Caspar va a quejarse a Leo, el irlandés se opone a que le haga nada a Bernie, más que probablemente, porque la mujer a la que ama, Verna (Marcia Gay Harden), es su hermana.
El asunto se complica cuando el lugarteniente de Leo, Tom Reagan (Gabriel Byrne), le indica a su jefe que deje de proteger a Bernie y no se enfrente a Caspar por su culpa. Además, Tom, mantiene relaciones con Verna a espaldas de Leo, lo que termina provocando un enfrentamiento entre ambos.
¿Está claro? o, como dice uno de los personajes, está claro como el barro.

Reducir este film a una película de gansters, es menospreciar todo lo que nos espera cuando nos ponemos ante la pantalla.

La historia está manida y el argumento trillado a más no poder ¿Entonces, por qué motivo muchos colocan esta peli como la mejor entre las de los Coen?
Sencillo, una vez más, no es lo que nos cuentan, sino cómo lo cuentan. Porque la historia parece la misma que hemos visto tantas veces, pero no es igual.

La película es de esas que hay que seguir con atención, la trama puede parecer embarullada, pero no lo es, lo que sucede es que ocurren tantas cosas y hay tantos giros imprevistos que, si te despistas, puedes perderte multitud de detalles. Precísamente el hecho que se sucedan acontecimientos sin tregua, hace que el ritmo de la peli no decaiga en ningún instante y, por otro lado, demuestra la maestría del realizador que sabe superar el riesgo que esto supone y lo encaja todo con perfección milimétrica.

A ese ritmo narrativo, se une una atmósfera maravillosa, gracias a la cuidada ambientación y la elegancia que aportan la bella fotografía, los diálogos inteligentes, los cuidados encuadres y las actuaciones de un espléndido plantel de actores que saben aprovechar el material que se pone a su disposición.

La narración gira en torno al personaje de Tom Reagan, un tipo complejo, pétreo, cínico y amoral. Es una especie de lugarteniente de Leo, pero exactamente nunca se nos dice cual es su papel en la organización, aunque tiene el respeto de todos dentro de ella.

Pero hay unas cuantas historias paralelas en torno a esta: La corrupción de políticos y policías; la crueldad; el amor (incluído el homosexual)...

Los tintes irónicos, incluso cómicos, muy bien entremezclados con las situaciones dramáticas, ayudan a descargar la tensión del planteamiento, dándole un aire de homenaje a los clásicos del género: Gansters acribillados a balazos que no acaban de caer; palizas que dejarían a cualquiera para ingresar en la UVI y que aquí no implican ni un rasguño; policías y políticos tratados con absoluto desdén por los mafiosos...

Los personajes se mueven entre la inteligencia y el patetismo, pasan de brillantes reflexiones a situaciones de auténticos incompetentes, pero ya digo que eso, a veces, se puede interpretar en clave de homenaje, pues el film está lleno de símbolos, algunos de ellos sin que sepamos (yo al menos), muy bien qué significan, como los sombreros que vuelan, se pierden o quedan pequeños en determinada cabeza, es como si quisieran dejar al espectador que cada cual haga su propia lectura.

Muy interesantes también los perfiles de los personajes, por no extenderme demasiado en un estudio detallado de los mismos, me quedo con el de Verna, que nos devuelve a alguna de aquellas mujeres fatales de los clásicos del noir, que sin ser una belleza despampanante, ni mucho menos, da un perfil de personaje atractivo por su turbiedad, por su independencia, por saber manejar a los hombres en su propio provecho. Pero todas las interpretaciones están muy conseguidas.

Un film más que digno en el que se ve la mano de dos genios que con el paso del tiempo parece que han perdido la tecla. Sí ya sé que para mucha gente siguen siendo lo que eran, pero yo, después de este film y del maravilloso Fargo, no puedo conformarme.
Es cierto que todos los grandes realizadores se mueven entre sus obras de arte y otros trabajos verdaderamente mediocres, así que yo sigo esperando que, de nuevo, nos regalen algún día otro film que esté a la altura de sus mejores momentos.



10 comentarios:

  1. Fargo me gustó mucho, pero esta no me apeteció por lo que ya te comenté otras veces...las comedias románticas no te van mucho ¿no? jeje

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  2. La mejor película de los Coen junto con "Fargo".
    Nunca entendí el fervor de la crítica hacia "No es país para viejos" y menos aún el Oscar a Javier Bardem, en una de las decisiones más absurdas y surrealistas de la Academia.

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    1. Lo que me ha costado que se publicara tu comentario, Natalia, ya había desistido y estaba dispuesto a copiarlo diciendo que era tuyo.
      Cosas de blogger.

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  3. Una película muy bien echa con un toque humorístico...

    Tiroteos y buena sintonia clásica, con una secuencias de lo mejorcito del cine.

    La interpretación de los actores superior, mi opinión es peli muy buena de 10.

    Saludos Trecce

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    1. Es un film en el que todo está milimetrado para que encaje.

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  4. Amigo creo que no la he visto, pero tal y como tú las relatas es como si las vieses todas. Das tantos detalles y tan explícitos que es una gozada.

    Saludos amigo Trecce.

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    1. Una de las pocas aportaciones al noir en los tiempos modernos, que merece la pena.

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  5. Estoy muy de acuerdo contigo: después de esta maravilla, los hermanos parece que han perdido un poco el norte. Pero bueno, tenemos ese sombrero volando que nos guía por el buen cine.

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    1. Lo que han hecho, sobre todo estas dos maravillas que hemos citado, nadie nos lo quita.
      Seguiremos esperando.

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