martes, 2 de octubre de 2012

¡ALTO, POLICÍA!

¡Qué difícil me resulta escribir sobre esto! Y no porque no sepa qué decir, no. Tengo mis ideas bastante claras en este aspecto, pero no deseo que se malinterpreten mis comentarios, así que no voy a entrar en si estuvo bien o no lo que hizo la policía el otro día en Madrid, aunque repito, tengo mi propia tesis sobre el asunto.
Tampoco voy a decir nada sobre los demagogos que compararon a los manifestantes con golpistas o aprendices de golpistas, ¡claro, como Tejero!, sólo que ni eran guardias civiles, ni llevaban metralletas, ni secuestraron a nadie; ni sobre los demagogos del otro lado que se ponen a invocar comparaciones entre nazis y este u otros gobiernos democráticos, porque está claro que el que se lleva el mamporro se queda con él, pero también que hay periodistas para informar, que los detenidos tienen amparo judicial y que nadie les va enviar a un campo de concentración.
Me fastidian estas situaciones, porque nos meten en el tunel del tiempo, de épocas que creíamos superadas, cuando no olvidadas. Creo que el poder, al final, cuando se le acaban los argumentos, o cuando no le gusta lo que le dicen, tiene tendencia a tirar de porra y, repito, es el poder, independientemente de la ideología. Si no, que se lo digan a los manifestantes antibolonia catalanes, que se las tuvieron tiesas con los Mossos d'esquadra que les envió el comunista Saura, entonces metido a sheriff. Ahora ha sido el PP y sus leales los que mandan a la policía a repartir estopa, ellos no se atreven, para eso están lo lacayos. No quiero disculpar a los violentos, que conste, por eso digo que me resulta difícil escribir sobre esto, porque hay tanto que matizar, pero la reflexión que me queda es de tristeza, de mucha tristeza, que unos policías españoles, peguen a unos manifestantes españoles por oden de unos políticos españoles. Algo falla aquí y alguien tendrá que reflexionar sobre por qué se llega a situaciones como esta donde se sustituye la palabra por el porrazo y la sangre vuelve a correr por unas calles de éste país antes llamado España.
Al final, tantos siglos de civilización, de avances, para que la gente se siga muriendo de hambre, para que siga habiendo delincuentes que matan por dinero o por placer, que siga habiendo mujeres ultrajadas y que la última palabra del poder siga siendo la misma que en los albores del la sociedades civilizadas: O vas por donde yo digo, o atente a las consecuencias.

 
 
 

12 comentarios:

  1. Trecce, en todas las democracias hay cuerpos antidisturbios con unas normas muy claras, lo de las dictaduras es otra cosa.

    Esto se veía venir porque llevan mucho tiempo calentando la calle, algunos muy interesadamente, y los lemas de una convocatoria que además no era autorizada-fundamental- eran "de aquí no nos vamos hasta que el gobierno dimita y haya asamblea constituyente y nueva constitución del pueblo", así que el que no quiera ver lo que esto significa pues allá sus entendederas, pero es claro y meridiano y ha de atenerse a las consecuencias de con quién y para qué se junta.
    Además la ignorancia de las leyes no exime de su cumplimiento y la ley lo dice también muy claro, es una coacción a los representantes electos y por tanto a la soberanía nacional, es otro tipo de golpismo diferente, pero lo es.

    Si no hay ley ni orden se rompe la baraja, y en eso están, debemos felicitarnos de que los CFSE garanticen su cumplimiento y la libertad y seguridad de todos.

    Un saludo

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    1. Estando de acuerdo contigo en que es légitimo por parte del poder garantizar la seguridad en la calle y en que siempre hay gente dispuesta a pescar en estos ríos revueltos, yo pienso que la calle no la han calentado solamente los interesados de la desestabilización (que también), creo que nuestros dirigentes están poniendo de su parte en este estado de cabreo colectivo.

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  2. Está claro que en todas las manifestaciones como en cualquier otros actos multitudinarios como ocurre por ejemplo en el fútbol y estamos hartos de verlo, siempre hay gente que se aprovecha de las circunstancias para liar bulla, pero son contados, y ello no les da "derecho" porque no lo tienen a que la policía bajo las ordenes del poder reparta palos sin consideración alguna. Y todavía más feo que el Gobierno diga que se trata de gente antisistema, y lo que ocurre es que los ciudadanos ya se están hartando de tanta canallada. Cuando la gente se manifiesta en una semana tres días frente al Congreso, no se trata de cuatro indocumentados sino de ciudadanos libres y democráticos que tienen derecho a hacerlo porque lo están pasando muy mal. El listillo de Rajoy mientras la policía repartía estopa a punta pala, él estaba en no sé donde fumándose un puro habano, y creo que fue al día siguiente felicitaba a los españoles diciendo que una mayoría de ciudadanos no se manifiestan. "Pues que le dure mucho y le rece a la Virgen María de que los que se manifiestan aún son minoría, pero el día que lo hagan setenta mil personas frente al Congreso, entonces ya veremos si la policía tiene agallas de tirar de porra".

    Saludos Trecce.

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    1. Es lo malo de esto, Rafa, que siempre hay algún justo que recibe un mamporro y eso a mí, me subleva, porque seguramente, ese ya no querrá volver a oír de la policía.

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  3. No pidas disculpas por opinar, querido 13, pues no es normal lo que está ocurriendo en España, empezando por la ralea política que ha creado esta situación de descontento y desilusión sin renunciar a los privilegios obtenidos durante décadas, y que no tiene el menor rubor en crear un cisma (léase Artur Mas) para salvar el pellejo ante tanto despropósito.
    La situación grave que vivimos los españoles no nos la hemos buscado y somos los que la padecemos. Que haya gente insultando a los manifestantes pacíficos, magnificando a los reventadores profesionales de "manifas" y a los delincuentes que se suman al evento (cuatro gatos que van con la cara tapada), no quiere decir que el plante ante el Congreso no sea una forma legítima de protestar por una situación injusta y nada democrática que sufrimos: cuando impera la razón, a los gobernantes sólo les queda la sinrazón de la fuerza bruta, que no distingue entre "perroflautas" y delincuentes comunes para cargar contra todo lo que se mueve, aunque sea con dos muletas: ¡ hemos visto el renacer de la "secreta" (¡Que es de los nuestros!)franquista, que se confundía con la gente para controlar a los cabecillas de la rebelión para después interrogarlos en la Puerta del Sol. Malos tiempos y malos modos que no deberían utilizarse en un país al que la democracia le ha costado miles de muertos y muchos años para conseguirla.
    Un saludo de un "facha" muy blando.

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    1. Yo tampoco soy ningún antisistema, Jano, todo lo contrario, me asustan estas cosas, precisamente porque he visto más de una vez cómo acaban y me da mucha pena. Como bien dices, malos tiempos.

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  4. Infunden un grado más de preocupación las manifestaciones de Cristina Cifuentes sobre "modular" o "modificar" manifestaciones, ocupación de vía pública etc. Eso si que tiene peligro. Mucho peligro.

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    1. Sí, a mí también me preocupa eso. Estos le ha cogido el gusto a la tijera y sólo falta que además de todo lo que han recortado, ahora les de por meterla en los derechos civiles.

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  5. Triste... Pero por buscar algo bueno, me quedo con Mafalda

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    1. Yo también, ahí está encerrada toda la filosofía de esta entrada que yo, pobre infeliz, no sé transmitir, pero que el genio de Quino resume en un par de viñetas y media docena de palabras.

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  6. Esa misma tarde, antes de la manifa, una delegada de CC.OO. me comentaba que iba a ir, pero que luego no se quedaba a los "palos". Ya contaban con ello.

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    1. La persona que hoy empieza una carrera, sabe que tiene muchas probabilidades de ir al paro o a la emigración. Ya cuenta con ello.
      A mí estos argumentos, con todo el respeto del mundo, no me quitan la tristeza.

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