lunes, 12 de octubre de 2015

LOVE STORY

Oliver Barrett IV (Ryan O'Neal) es un notable estudiante y gran deportista, apasionado del hockey sobre hielo. Un día, en la biblioteca de la universidad, conoce a una estudiante de música Jennifer Cavilleri (Ali MacGraw) surgiendo entre los dos una innegable atracción que les lleva a plantearse contraer matrimonio, aunque para ello, Jenny tenga que renunciar a una beca que la llevaría a ampliar estudios en París, ya que Oliver debe estudiar de firme, primero para conseguir su ingreso en Harvard y, más tarde, para sacar la carrera de derecho con notas brillantes, para lo cual, Jenny habrá de trabajar y ser el sostén económico de la familia.
Oliver mantiene una agria relación con su familia, sobre todo con su padre, Oliver Barrett III (Ray Milland), pues piensa que no valora su trabajo y que ve sus éxitos como algo a lo que está obligado, situación que Jenny trata de suavizar, sin conseguirlo.
Oliver y Jenny deciden tener un hijo, una vez que él ha encontrado trabajo en un prestigioso bufete, sin embargo, pasa el tiempo sin que Jenny quede embarazada, por lo que se someten a pruebas médicas. Los análisis serán mensajeros de malas nuevas para la joven pareja que verá como su felicidad sufre un traspiés irreparable.


Erich Segal escribió el guión de Love Story, una película que sería rodada con unos medios limitados, algo que se nota en el rodaje por las calles de Nueva York, ciudad en la que no tenían autorización para sacar la cámara a la calle porque el presupuesto se había acabado y lo resuelven a base de planos largos e imágenes tomadas de forma "clandestina".
El caso es que entre productora y autor, deciden adaptar el guión en forma de novela, un proceso inverso al habitual. El libro salió meses antes del estreno y se convirtió en un superventas.


Love Story es un icono del cine, para disgusto de algunos que la tachan de película rosa y que juega con los sentimientos. En fin, no voy a entrar en eso, porque es difícil conciliar posiciones encontradas después de tantos años, el caso es que filmes de este tipo los hay a millares, ¿por qué otros no consiguieron lo que este? Supongo que algún mérito tendrá el guión que ha sabido conjugar una historia sencilla y cien veces contada, dándole un toque atractivo y humano.
Sea como fuere, la película consiguió que miles de jóvenes se enamoraran, ellas de Ryan O'Neal, pero sobre todo, ellos de Ali MacGraw.
Y, por último, la estupenda banda sonora de Francis Lai, con ese tema principal que se ha convertido en un clásico, además de valerle el único Oscar del film, le ha supuesto un lugar destacado en la historia de la música de cine.

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